La Mañana en Radio Ubrique – 30/11/2012
Mañana sábado los restos de las 28 víctimas encontradas en siete fosas comunes en El Marrufo durante el proyecto de exhumación realizado el pasado verano, serán enterradas en el recién rehabilitado cementerio de la Sauceda.
El acto forma parte del proyecto de Recuperación de la Memoria Histórica que se está llevando a cabo por la Asociación de Familiares de Represaliados por el Franquismo de la Sauceda y el Marrufo y supone el primer reconocimiento de este nivel a las cientos de personas que pudieron ser fusiladas entre noviembre de 1936 y febrero de 1937 en el Valle de la Sauceda, según los testimonios orales de los descendientes y las investigaciones archivísticas realizadas durante el proyecto.
Según se recoge en la nota de prensa enviada por el colectivo, «cabe recordar que estos restos humanos corresponden a personas que fueron enterradas clandestinamente en el mencionado cortijo, tras ser éste ocupado a comienzos de noviembre de 1936 por cuatro columnas sublevadas contra la República en una acción combinada. Previamente, la Sauceda y el Marrufo se habían convertido en el último lugar de resistencia republicana, como refugio de cientos de familias residentes y de otras muchas procedentes de distintos núcleos de los alrededores (Jimena, Cortes, Algar, Alcalá de los Gazules, San José del Valle, el Mimbral, Ubrique), que huían del avance de las tropas rebeldes. Tras ser tomado, el Marrufo se convirtió en un acuertelamiento al mando del jefe de la Guardia Civil de Ubrique, José Robles Alés, que hizo de esta finca un centro de detención, tortura y fusilamientos«.
El proyecto contaba con diversas fases, en la actualidad se está completando la segunda parte que comprendía la exhumación de los restos llevada a cabo este verano en el Marrufo (donde fueron hallados 7 fosas comunes y 28 cuerpos) y la elaboración de los informes en el ámbito antropológico, forense e histórico. Todos ellos formarán parte de una publicación que se editará en el 2013.
Asimismo, para la primavera del próximo año está previsto que comience la tercera fase, donde se continuará con las excavaciones abarcando una zona más amplia intervención, en concreto en el antiguo poblado de la Sauceda y donde se han detectado anomalías en el terreno según los trabajos realizados con georadar . Esta actuación llegará financiada por la Junta de Andalucía.
También hasta principios de 2013 no se contará con los resultados de las pruebas de ADN realizadas a descendientes cuyos familiares podrían haber sido fusilados en esta zona. Entonces se podrán cotejar con los restos óseos hallados en el Marrufo para su identificación. El entierro de las 28 víctimas será por tanto individualizado y contarán con una referencia numérica, para su futura distinción.
El acto comenzará a las doce del mediodía previo traslado de los cuerpos desde Jimena de la Frontera (donde han permanecido hasta ahora realizando el estudio forense) al cementerio de la Sauceda. El campo santo en desuso desde los años 60 ha sido rehabilitado gracias a los fondos del Grupo Festina, cuyo propietario, nieto de un fusilado, ha financiado además los trabajos de exhumación de la finca del Marrufo.